Consejos para triunfar en cualquier examen oral

¿Tienes que presentar un examen oral próximamente y quieres prepararte de la mejor forma? ¿Quieres aprender a hablar en público ante profesores y compañeros? En este artículo te ayudaremos a enfrentarte a estos retos para que consigas la mejor calificación posible.

Diferencias entre examen oral y exposición

Antes de pasar a los consejos es necesario diferenciar entre una prueba oral y una exposición. La primera es un ejercicio pedagógico en el que el profesor evalúa los conocimientos de un alumno a través de preguntas orales. Por así decirlo, es lo contrario a un examen escrito. Por otro lado, una exposición es una práctica en la que un alumno o grupo de alumnos se encargan de presentar al profesor y a sus compañeros un tema en específico.

Cómo prepararse para un examen oral

Los siguientes consejos son para pruebas orales, es decir, aquellas en las que tu profesor te hará preguntas directas que debes responder de forma oral. Estas técnicas para hablar en público también te serán de ayuda para otros tipos de ejercicios orales.

Estudia en voz alta

Esto es muy importante. Si vas a presentar una prueba oral es necesario que estudies en voz alta. ¿Por qué? Porque enunciar tus conocimientos te ayudará a conectar y argumentar tus ideas. Por eso no basta con pensar tus respuestas.

Tip extra: Grábate. Así podrás escuchar en qué momentos te trabas y encontrar mejores formas de exponer una idea.

Practica con ayuda de alguien

Si bien es posible estudiar solo para un examen de este tipo, siempre es mejor contar con la retroalimentación de un compañero o compañeros. Puedes armar un equipo de peer coaching y estudiar en conjunto. Así todos pueden hacerse recomendaciones mutuas y aprender de las buenas prácticas de otros.

Además, practicar en grupo te permitirá superar el miedo a hablar en público, si es tu caso, ya que puedes elegir a compañeros en los que confíes plenamente que te ayudarán a mejorar tu comunicación en voz alta.

Establece contacto visual con tu profesor durante el examen

Existen diferentes formatos de pruebas orales, pero uno de los más comunes es en el que tú y tu profesor estarán solos en el salón, ambos sentados y de frente. Tu maestro te hará preguntas que tú tendrás que resolver de forma inmediata y clara.

Una excelente forma de demostrar seguridad en tus conocimientos es mantener el contacto visual con tu profesor. Además, evitas que tu maestro crea que estás buscando las respuestas en otro lugar.

Cuida tu lenguaje no verbal

Relacionado con el punto anterior, una de las grandes ventajas de los exámenes orales es que tienes un elemento extra a tu favor: tu lenguaje no verbal, es decir, movimientos con las manos o gestos. No se trata de que estés estático como estatua, sino todo lo contrario, si una de tus respuestas puede ser reforzada con un movimiento de mano o un gesto, hazlo. Esto transmite a tu profesor que no solo sabes sobre el tema, sino que también sabes comunicarlo.

Responde las preguntas

Parecería ser un punto básico, sin embargo, es importante subrayarlo: evita irte por las ramas. Si la pregunta de tu profesor se tiene que responder con un sí o un no y se te permite desarrollar tu respuesta, empieza tu respuesta con un sí o un no y después desarróllala. De igual forma, si tu maestro te pregunta por X, no respondas Y.

Tip extra: Se vale pedirle a tu profesor 10 o 15 segundos para que puedas pensar tu respuesta o la forma como vas a presentársela.

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